El claustro

Aprovechemos que estamos en exterior para hablar del claustro, que se extiende perimetralmente a lo largo del templo, interrumpido sólo por las fachadas y el ábside, y cuya estructura con ventanas góticas puedes localizar a izquierda y derecha de la portada del Nacimiento.

Fue concebido por Gaudí con una doble función. Por una parte aislar el templo del ruido del exterior y por otro actúa como elemento procesional y de comunicación entre los distintos ámbitos de la basílica sin interrumpir el culto. Se trata de un concepto bastante novedoso, pues lo normal es que el claustro se encuentre a un lado de la iglesia, dejando espacio para un pequeño jardín en el centro y no rodeando el propio templo, como lo proyectó Gaudí.

Como verás tiene tres niveles, que evolucionan desde una arquitectura neogótica hasta un estilo mucho más naturalista, acorde a la propia evolución de estilo en Gaudí. Fíjate en los coloristas pináculos de la nave central. ¿Sabrías decir que son esas formas?...Son frutos relacionados con la Eucaristía, como las espigas de trigo o las uvas. En este lado, el del Nacimiento aparecen las que nacen en primavera, mientras que en el lado opuesto, el de la Pasión, hay frutas propias de la temporada de otoño.

Cuando entres al templo fíjate en la intersección del claustro con el pórtico de la Fe. Verás la puerta de la Virgen del Rosario, profusamente decorada, y cuyo tema central es la tentación. Sin duda el elemento más curioso que podemos contemplar es la escultura del Diablo entregando una bomba a un hombre. Sí, has oído bien, una bomba, en referencia a los sangrientos atentados anarquistas que fueron muy frecuentes en Barcelona a finales del siglo XIX.



(c) (R) 2013, MUSMon com S.L.
Text (a) Diego Laforga Marcos (2013)

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Source: Own work
Author: Carlos Marcos (2013)