¿Te encuentras ya en el crucero? Te hablaré entonces de las capillas más interesantes de esta zona del templo. Pasada la de la Concepción, hallarás la del Sancti Spiritus, del siglo XIII, que alberga entre sus muros siete sepulcros de clérigos, lo que demuestra el interés que siempre hubo por estar enterrados cerca del apóstol, garantía de un ascenso rápido y seguro al cielo.

Verás a continuación un corredor del que parten unas escaleras. Al final de ellas está la Capilla de la Corticela. Está considerada como uno de los edificios más antiguo de la ciudad, pues ya existía en el siglo IX y su unión a la Catedral costó duros enfrentamiento con los monjes titulares. Aún mantiene el carácter primitivo de parroquia. Es muy interesante su portada románica, con un tímpano atribuido al taller del Maestro Mateo, donde puedes ver la adoración de los Reyes Magos.

Vuelve al Crucero. La gran puerta doble que tienes a tu lado corresponde al anverso de la puerta de la Azabachería, cuyo frente veremos cuando salgamos al exterior. Cerca de ella encontrarás una colorista estatua de un apóstol Santiago guerrero, con los atributos que le valieron el apelativo de Matamoros: cabezas decapitadas por doquier y moros pateados por el caballo del santo, que blande su vengadora espada, un arma que originalmente aludía a su decapitación, pero que en tiempos de la reconquista pasó a cortar otras cabezas, las de sus enemigos. Las cabezas sarracenas suelen estar ocultas por un ramo de flores, para evitar ofender a los visitantes de religión islámica.

Las siguientes capillas corresponden a las naves.




(c) (R) 2013, MUSMon com S.L.
Text (a) Diego Laforga Marcos

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Source: Own work
Author: Diego Laforga (2013)