Busca, amigo peregrino o viajero, desde dónde contemplar todo el esplendor de esta magnífica fachada de Platerías, que es la única de época románica que ha llegado hasta nuestros días. Es posible que creas estar ante un rompecabezas de figuras recolocadas y encajadas a la fuerza, como así ha ocurrido con algunas de las imágenes que, procedentes de otras zonas de la Catedral, fueron reutilizadas cuando el románico fue sustitudio por nuevos estilos.

Como verás, el friso que se extiende sobre las puertas está muy dañado, pero podrás identificar algunas figuras. Está presidido por un Cristo gótico que tiene a su lado al apóstol Santiago, flanqueado por troncos de árbol. Las estatuillas del otro lateral son románicas, pero fueron colocadas en el siglo XIX.

A los pies del Cristo se encuentra Abraham saliendo de una sepultura y, justo debajo, Moisés y el monograma de Cristo sobre dos leones.

El tímpano de la puerta izquierda, atribuido al Maestro Mateo, trata de las tentaciones de Jesús. No te será difícil identificar a los diablos en las monstruosas figuras negras. Localiza la mujer que enseña el pecho y sujeta un cráneo. El Calixtino dice que es una pecadora que sostiene la cabeza de su amante, cortada por el marido, quien la obliga a besarla dos veces al día.

Las escenas del otro tímpano son menos escabrosas, correspondiendo las mejor conservadas a la Pasión y al milagro del ciego que recobró la vista.

Merece que prestes atención al contrafuerte de tu izquierda, donde destaca un soberbio David que tañe una viola, figura habitualmente utilizada como logo para temas relacionados con la música. Sobre esta figura hay una imagen de Dios creando al hombre con el simbólico gesto de ponerle encima la mano.

Ahora dirígete al centro de la plaza para observar las torres que flanquean esta fachada.


(c) (R) 2013, MUSMon com S.L.
Text (a) Diego Laforga Marcos

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Source: Own work
Author: Diego Laforga (2013)